Un Regalo Francés

Se construyó en París y es uno de los regalos más caros del mundo, el conocido símbolo de la Libertad fue un obsequio francés a la ciudad de New York al cumplirse los primeros cien años de la independencia de Norteamérica en 1886.

Realizada por el escultor Frédéric-Auguste Bartholdi en cobre y acero, con estilo grecorromano, "Lady Liberty" mide unos 46 metros de alto y pesa 204 toneladas, se necesitaron 241 cajas para embarcar a toda su figura en su viaje definitivo rumbo a los Estados Unidos de América.

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La colosal estatua o "La libertad iluminando al mundo" está situada en Isla de Bedloe o Isla de la Libertad, como se rebautizo en 1956, en la desembocadura del Río Hudson. La Marianne sería su nombre francés por representar, precisamente el símbolo de "Libertad, Igualdad y Fraternidad" de la República francesa.

La Estatua de la Libertad tiene un modelo original, con 15 pies de alto. La miniatura sirvío a Batholdi de base para construir la estatua americana y hoy se encuentra en los Jardines de Luxemburgo, en los alrededores del Senado francés, en París.

Mucho mantenimiento ha exigido la estatua durante toda su vida debido a su armazón hecha de placas de cobre. La conocida antorcha de la estatua sufrió modificaciones posteriores producto del deterioro y ha sido sustituida por otra con la llama bañada en oro que, al ser iluminada, da el efecto de fuego. En su mano izquierda una tableta muestra la inscripción "Julio IV MDCCLXXVI" por el 4 de julio de 1776, fecha que se reconoce como el día de la declaración de independencia de las colonias inglesas en los Estados Unidos, la libertad adquirida es representada por unas cadenas que pisa uno de los pies de la gigantesca estatua. En su cabeza se luce una corona de siete rayos que representan los siete mares del planeta.

La Estatua de la Libertad se convirtió, rápidamente, en un símbolo del país americano y representante de la libertad, fraternidad y democracia para el mundo y para muchos inmigrantes que llegaron y llegan a los Estados Unidos.
Ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Recuerdo una excursión que hice a la estatua. Puedo decir que la Statue of Liberty, además de lo que significa es un colosal monumento que nos hace sentir pequeños ante tanta grandeza. Las vistas desde el interior son fascinantes, se puede subir por medio de unos ascensores y luego por medio de unas escaleras de hierro que nos llevan hasta la antorcha y la corona; la visita a la lady es imperdible.
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